En una firma de asesoría, una consultora revisa por cuarta vez un documento fiscal antes de archivarlo, mientras su compañero introduce manualmente los datos de un contrato en el ERP. En otro despacho, un técnico legal repasa plazos normativos en una hoja de cálculo, buscando a contrarreloj posibles vencimientos. El tiempo corre, las tareas se repiten y los errores —inevitables cuando todo recae en el factor humano— se cuelan sin ruido en los procesos.
El sector legal y de consultoría, tan vinculado a la gestión documental, el cumplimiento normativo y la precisión operativa, ha convivido durante años con esta rutina constante y exigente. Pero algo está cambiando. Y es la automatización inteligente la que está transformando esa rutina en eficiencia real.
El nuevo paradigma: automatización inteligente con RPA e IA
La Automatización Robótica de Procesos (RPA) permite delegar tareas digitales repetitivas en robots de software que operan sobre los mismos entornos que usaría una persona. Estos sistemas abren aplicaciones, trasladan datos entre plataformas, completan registros, generan documentos… todo sin interrupciones ni margen para el despiste.
Al combinar esta tecnología con capacidades de inteligencia artificial, el alcance se amplía: ya no se trata solo de ejecutar, sino también de comprender. La IA es capaz de interpretar textos, detectar patrones, leer documentos no estructurados y tomar decisiones según lógicas complejas. En conjunto, forman una solución que cambia cómo las organizaciones gestionan su información.
En Devol llevamos cerca de diez años acompañando a empresas en este camino. Nuestra experiencia y la aplicación de metodologías adaptadas nos han permitido crear soluciones específicas para sectores como el legal y la consultoría, donde la presión documental y el control normativo exigen una precisión extrema. Contamos con un stack propio de herramientas como Process 360, DocMind, SQLMind y Devol 4 Invoices. Todo ello sin necesidad de modificar la infraestructura existente.
Automatización en el sector legal y de consultoría: casos reales
La práctica jurídica y consultiva no solo se compone de informes complejos o dictámenes personalizados. Buena parte del trabajo diario está en tareas como la recepción de notificaciones judiciales, la elaboración de escritos tipo, la organización de expedientes, el cumplimiento de plazos o la supervisión contable. Actividades que, aunque rutinarias, consumen tiempo y conllevan riesgo si se omite un paso.
A continuación, repasamos algunos de los procesos que ya automatizan nuestros clientes:
Escrituras, demandas y contratos
Con la ayuda de inteligencia artificial, nuestros robots analizan documentos legales y financieros —como contratos, actas, balances, escritos de demanda o notificaciones judiciales— y extraen la información clave. Estos datos se estructuran automáticamente y se integran en los sistemas internos, eliminando la necesidad de revisión y carga manual.
Expedientes siempre actualizados
En muchos despachos y asesorías, la actualización de expedientes implica múltiples pasos y herramientas. El robot navega entre plataformas, recopila documentos, asigna códigos, renombra archivos y los deposita en la carpeta o sistema correspondiente. Todo ocurre sin intervención humana.
Control de plazos y cumplimiento normativo
La vigilancia de los plazos legales es crítica. Hemos automatizado la generación de alertas, la actualización de agendas jurídicas y contables, y el envío de avisos según vencimientos definidos. Además, se automatizan controles para normativas como RGPD o PBC.
Consultas automatizadas en fuentes oficiales
Nuestros bots acceden a registros, boletines oficiales, sedes judiciales y portales de contratación. Buscan nombres, referencias, resoluciones o normativas relevantes. Esta información se descarga, analiza y clasifica sin intervención del equipo.
Facturación sin fricción
Desde la emisión de minutas hasta informes para clientes, nuestros clientes han delegado la parte contable al robot: toma datos, aplica reglas, emite documentos y genera archivos para contabilidad. Todo con integración a ERPs y CRMs como SAP, Dynamics, Aranzadi o Lefebvre.
Generación Aumentada por Recuperación (RAG)
La tecnología RAG permite monitorizar fuentes externas, detectar publicaciones clave y generar informes automáticos o respuestas jurídicas contextualizadas. Aumenta la capacidad de reacción y mejora el acceso a la información crítica.
Resultados que se notan desde el primer día
La automatización inteligente no sustituye la labor profesional. La respalda. Permite que abogados, asesores y técnicos dediquen su tiempo a tareas que requieren análisis, juicio y estrategia. El resultado es un entorno de trabajo más ágil, ordenado y preciso.
Con robots que trabajan en segundo plano, nuestros clientes ya están experimentando:
- Reducción de errores y olvidos en trámites clave
- Expedientes y cuentas actualizadas
- Más tiempo disponible para asesoramiento personalizado
- Informes y minutas generados sin demoras
- Capacidad de escalar sin aumentar plantilla
RPA, IA y RAG: una apuesta segura para legal y consultoría
El mundo profesional está cambiando. La digitalización no es una opción futura, sino una necesidad actual. Y las firmas que no den el paso hacia la automatización corren el riesgo de quedar desfasadas.
Las exigencias normativas aumentan, los plazos se ajustan, los clientes reclaman mayor agilidad. En este escenario, apoyarse en herramientas como RPA, IA y RAG no es un lujo, sino una solución urgente.
En Devol no ofrecemos soluciones genéricas. Creamos proyectos adaptados, rápidos de desarrollar, y que no exigen cambios en los sistemas actuales. Nuestra propuesta es clara: automatizar sin complicar.
Los robots invisibles ya trabajan para el sector legal y la consultoría. No para sustituir, sino para liberar. Porque cuando el papel, el dato y el plazo dejan de ser un problema, todo funciona mejor.